Cómo limpar una pluma estilográfica?

20 de mayo de 2011 - 05:21

Limpiar una pluma estilográfica es, en la mayoría de los casos, se trata de un proceso muy sencillo y que cualquier aficionado puede realizar (salvo en algunos modelos de plumas que de los cuales se referirá más adelante)

Los materiales a utilizar son:

Agua (preferiblemente destilada)
Vaso de plástico desechable
Papel de periódico (para poner debajo del vaso)
Papel de cocina absorvente o, en su defecto, paño de algodón
Papel higiénico (no e spor el miedo )
Paño de microfibra (de esos modernos para limpiar las gafas)
Lo más importante de todo: Ninguna prisa y paciencia

El procedimiento

En primer lugar, se da por supuesto que nos referimos con este proceso a plumas modernas a la hora de limpiarlas, aunque la mayoría de los pasos es común al de las «fountain pen». Éstas requieren, en la mayoría de los casos, desmontar por completo la pluma para poder llevar a cabo una limpieza profunda de todos sus elementos.
Desmontar la pluma, separar el sistema de carga (cartucho o alimentador) de la boquilla (si se puede, en la mayoría de las modernas, excepto MB y algunas de ballesta, sí se puede)
Llenar el vaso con el agua destilada, extender el periódico en una superficie plana
Introducir la boquilla en el agua destilada, tiene que quedar completamente sumergida. Dejarla no menos de 24 horas antes de seguir
En el caso de plumas que no se pueda separar el sistema de carga, meter la boquilla, igualmente, por completo. Dejarla no menos de 24 horas antes de seguir
Los sistemas de carga desmontables (émbolos con pistón en su mayoría) se pueden limpiar introcudiendo agua en ellos repetidas veces, hasta que comprobemos que sale limpia.
En las plumas en las que no hayamos podido desmontar los sistemas de carga, tras pasar al menos 24 horas a remojo la boquilla, proceder de la misma manera (con agua limpia) haciendo lavados con agua como si cargásemos normalmente tinta. Este proceso limpiará el sistema de carga y el sistema de alimentación. Repetir, de nuevo con paciencia, hasta que el agua salga limpia (nunca saldrá del todo limpia, es cuestión de ver que sale con pocos restos de tinta)
En las boquillas que hemos introducido separadas del sistema de carga, lo ideal es limpiar el sistema de alimentación usando una jeringuilla a la que habremos acoplado un manguito de caucho flexible para ajustarlo al alimentador. De esta manera limpiaremos a presión (jeringazos de agua destilada) es sistema de alimentación con mayor minuciosidad. Si no disponemos de esto, aclarar el interior del sistema de alimentación (donde encajamos el cartucho o el sistema de carga) con agua destilada. Repetir hasta que veamos que no quedan restos de tinta
Si disponemos de un compresor de aire, soplar el interior del sistema de alimentación para secar. En su defecto, soplar a «morro» (como si inflases un globo)
En las plumas que no podemos separar el sistema de carga, apoyar el plumín sobre el papel de cocina absorbente para que este saque por capilaridad el agua. También se puede usar un paño de algodón con el mismo fin.
Repasar con el papel higiénico el interior del sistema de alimentación (de las plumas en que se puede desmontar, obviamente)
Limpiar con papel higiénico el plumín. Pulir con el pañito de microfibra
Limpiar con el pañito de microfibra el cuerpo de la pluma y el capuchón ( si el material del capuchón lo permite, meter este en agua durante 24 horas y después secar soplando con compresor o con papel higiénico).